viernes, 31 de agosto de 2007

Triste pero cierto

Y mira que me cuesta reconocerlo, pero te metes en un "campo de cardos" y te das cuenta de que lo de cardos es literal.
Reconozco que he pasado por varias fases. Antes de empezar a trabajar aquí pensaba que el machismo era evidente en este mundo. Una vez dentro, debe ser porque como eres nueva todo es nuevo y te cuesta fijarte en los detalles, pensaba que no, que las únicas diferencias en cuestión de trabajo las marcaba tu posición en la pirámide de importancia, en la que porsupuesto estoy abajo del todo. Finalmente, y cuando ya todo es rutina, y te empiezas a fijar en cosas ... ahí es cuando te das cuenta de que el machismo existe y, lo peor de todo, sus normas se aplican con total normalidad.

En serio, sienta mejor que no te encarguen hacer tantos trabajos como a tu compañerO (CHICO), ese que tiene está a tu lado en la pirámide, porque no les caigas bien o porque no confíen en ti, que por ser tía. Sinceramente.

Cuando llevas ya varias seguidas empiezas a ver cómo todo podría funcionar mucho mejor con un par de mujeres al frente de tanto cafre, tanto cardo prehistórico apiñado en su asiento. Y no es feminismo, es la cruda realidad.

La caspa rancia, antigua y producida por una amargura de género empieza a caer sobre tí y es entonces cuando piensas que pagarán por esto... porque en el fondo lo que les molesta es tener que trabajar con nosotras.

Es un machismo sutil, residual e inútil. Inútil porque no se dan cuenta de que el problema no es el sexo, sino la competencia. Y nosotras somos más y más competentes. El problema son ellos, su actitud y su mente. Débiles incapaces de adaptarse a un mundo que es tan nuestro como suyo. Se siente.

3 comentarios:

Marta dijo...

"Y nosotras somos más y más competentes" jajaja me ha encantado este post, d verdad. Y dices grandes verdades. Me parece genial y además muy necesario que les pongas a todos en el sitio que les corresponde, que es a nuestro lado, y no por encima de nosotras. Es más, algunos yo diría que se merecen estar a la altura de pulgas y cucarachas, entre las amebas y los sapos en la escala evolutiva. Pero por desgracia muchas veces están con nosotras en nuestro día a día. Y estos seres machistas y bobos en general cobran formas muy varidas, como jefes de redacción e incluso algunos llegan a creerse de verdad que son mejores que nosotras por el simple hecho de tener testículos!! Ahí radica la simpleza de sus neuronas (o neurona en este caso)

Anónimo dijo...

¡Gran punto! Yo creo que con un par de ovarios "nosotras" podemos hacer que esto cambie. Ha cambiado mucho en los últimos años y ha sido gracias a grandes mujeres que han demostrado que la igualdad de género no debe ser teórica si no que es real y debe aplicarse a todos los ámbitos. En esta profesión, no sólo en el ámbito deportivo, hay bastante machismo... Así que a por todas... Aunque por desgracia también quedan muchas mujeres que fomentan el machismo y eso es aun más triste... Un besito niñaa!!!
Mònica

Anónimo dijo...

Te aplaudo!!No puedo estar más de acuerdo contigo. Lo peor es como tú dices que cuando empezamos pensamos que es una leyenda urbana y que todo es fantástico, eso sí, reconozco que alguna excepción hay. Me ha encantado el post!!un besito.
MIRI