Creo que hoy acaba los exámenes. Y creo, porque hace días que no hablamos. No se puede decir que antes hablásemos demasiado, pero ahora la dejadez se ha convertido en silencio, quizá intencionado, en espacio forzado, y las cosas no van bien.
Dice que sigue esto a veces, que le gusta como escribo, que soy capaz de expresar en palabras cosas que ella no es capaz de decir, de mostrar a los demás. Y a pesar de ser una carta abierta a ella (y a todo el que sienta que necesite arreglar algo con alguien importante) no estoy realmente segura de poder expresarme todo lo bien que querría. Quiero que me entienda, que haga un esfuerzo.
Muchas veces he pensado en escribirle cartas y dejárselas en el buzón (soy así, me encantan esas cosas...), como ella hizo una vez conmigo. Carta que conservo como un tesoro porque es una de las pocas veces que ella me ha dicho parte de lo que siente. Le cuesta hablar. Incluso con aquellos con los que no tendría que tener miedo a nada.
Pero una tras otra, esas ideas se han ido rápido. Han desaparecido al sentir desinterés, al oir malas contestaciones, al notar que, en realidad, y aunque crea que esto no es cierto, a ella no le 'interesa' mantener nuestra relación. O por lo menos no del modo que me gusta a mí, cerca, con secretos, intimidades, noches en vela charlando, llamadas telefónicas en momentos clave...
Ya no me cuenta nada, porque entre otras cosas no la veo. No se que hace que se aleje pero como la marea tiene épocas... a veces sientes que se acerca y confía en tí, cuenta contigo para sus cosas y otras... otras simplemente te enteras de acontecimientos importantes en su vida delante de otras 15 personas (mucho menos íntimas) o mediante terceras personas, para las que la noticia no pasa de un rumor sin confirmar.
Y duele. Y como sentir que una amiga se aleja es de las cosas más dolorosas que hay, y no quieres ni pensar que eso puede estar pasando, la defiendes siempre que alguien se cuestiona su actitud con el resto. Justificas lo que hace, porque la quieres.
Pero llega un día, que por un comentario, uno pequeño, pero uno más, se acaba. Y se acaba porque todo tiene un límite. Y yo puede que haya llegado al mío. Mi límite de observar sin preguntar, de hacer entender a los demás sin entenderlo yo misma, de aguantar una actitud que no hace más que separarla no solo de mí.. si no de más gente que simplemente la quiere.... TE QUIERE.
No se por qué nunca me cuenta como se siente, por qué no confía en mí, qué le hace pensar que conmigo no puede contar para eso... y no se que hace que ella sepa cosas que no quiera comentar conmigo por, quizá, el miedo a tener que decidir...
He intentado encontrar una canción que nos uniera, una que nos definiera a las dos en nuestos buenos momentos, en nuestros días de risa, fiesta y bailes... pero no la he encontrado, y es bastante triste pensar que ni siquiera tienes eso con una de tus mejores amigas.. con una de las personas a las que más quieres...
No se, pero es la única persona a la que he "perdono" con más facilidad. Siempre pienso (y digo), "déjalo, es ella.. Ya sabes como es". Y puede que de tanto olvidar esas cosas se hayan quedado todas a mis pies, y ahora no pueda levantarlas, sólo con una más. Con una tontería.
No estoy enfadada...Estoy triste..porque es importante para mí, y creo que, aunque lo sabe no lo valora, o no hace lo suficiente para mantenerse a mi lado...Espero el día en el que me hable sinceramente, sin eso que le hace callar, que le impide ser quien realmente es. Hay tanto que decir... Hay tanto de lo que hablar que creo que ella y yo nunca hablaremos...
Ni siquiera se si leerá esto... me dijo que seguía el Blog..pero lo dudo, sinceramente...